TREN TURÍSTICO "LIMÓN EXPRÉS" ENTRE BENIDORM Y GATA DE GORGOS (ESPAÑA), Y TRISTEMENTE DESAPARECIDO EN 2005.
CONDUJE EL "LIMÓN EXPRÉS" MÁS DE 400 TRAYECTOS DE IDA Y VUELTA ENTRE 1983 Y 2005.
LA FOTOGRAFÍA ES DE VICENTE SERRAT, UN GRAN AMIGO FERROVIARIO.

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SALUDOS DESDE ALICANTE

PARA LOS 600 MILLONES DE HISPANOS DE AMBOS EMISFERIOS.

VIVA LA HISPANIDAD.

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domingo, 21 de julio de 2024

¿QUÉ EUROPA QUIERES?

 


En España, al igual que en los demás Estados de la Unión Europea, hemos votado recientemente para elegir el Parlamento Europeo. Como de costumbre, la participación ha sido baja. La causa siempre es la misma: la ciudadanía no es consciente de que muchas políticas de la UE nos gobiernan en exclusividad. Y si es conocedora, sabe que el Parlamento Europeo no influye en la agenda política europea, y por tanto, su poder legislativo es limitado y su poder político es nulo.

 

En un sistema político democrático, los partidos políticos se presentan a las elecciones legislativas con su programa de gobierno para toda la nación, y si es ganador forma gobierno, empieza a legislar y gobernar. Los ciudadanos acuden a las urnas sabiendo lo que está en juego. Pues en la Unión Europea no, su sistema político no es democrático, es complejo y diferente a cualquier otro sistema conocido. La consecuencia es que desde principio del milenio, las políticas de la UE son ultraconservadoras, no ha habido competencia ni alternancia. Todas las acciones de gobierno de la Comisión Europea se han dirigido a fortalecer el Mercado Único y la Política Monetaria Común, aun a costa de endeudarse. Los grandes protagonistas y ganadores son los grupos de interés con predominio de las multinacionales de las finanzas, de la producción y del consumo. La Europa social brilla por su ausencia. Las políticas progresistas están vetadas. Y no es cuestión de derecha o izquierda. Por muy paradojo que pueda parecer, la clase media, la de las profesiones independientes, la pequeña burguesía local de los negocios tradicionales, pequeños y medianos empresarios, las clases acomodadas europeas también pierden estatus social y poder económico con las políticas conservadoras de la UE. Este panorama explica el auge de los partidos de extrema derecha en toda Europa.

 

No debemos olvidar que en las décadas de los años 20 y 30 del siglo pasado, la mayoría de las naciones europeas tuvimos gobiernos fascistas. En política está comprobado que el fascismo aparece cuando las clases acomodadas ven peligrar sus privilegios y se alían con el ejército. Por una parte, los vencedores de la Primera Guerra Mundial impusieron a los vencidos unas reparaciones de guerra imposible de pagar. Por otra parte, la Revolución bolchevique creó pánico en las clases tradicionales europeas. Y es lo que originó el auge y llegada al poder del fascismo en la Europa del S.XX. Los partidos políticos de extrema derecha concurrieron en los sistemas democráticos para llegar al poder, y una vez en el gobierno finiquitaron la democracia para restablecer sus privilegios, poder social, económico y político. De esta metamorfosis nacieron los gobiernos fascistas. El auge del fascismo europeo empezó después de la Primera Guerra Mundial, cuando Alemania dejó de pagar su deuda, y sucumbió con su derrota militar en la Segunda Guerra Mundial.

 

El mismo proceso se ha iniciado en los Estados de la Unión Europea, aunque ahora los motivos son diferentes. Los protagonistas económicos son las multinacionales, se han adueñado de todos los mercados, los productivos, los de consumo y los financieros, y condicionan el gasto e inversiones públicas. El Mercado Único, la Política Monetaria y otras muchas competencias se regulan y se deciden en Bruselas. Y en Bruselas están instaladas desde los años 50 del siglo pasado todas las multinacionales, y como el Sistema Político de la UE concede demasiado protagonismo a los grupos de interés, pues estos lobbies son los agentes privilegiados de las políticas de la UE. Y como los gobiernos nacionales continúan cediendo competencias a las Instituciones de la UE, pues la burguesía tradicional europea no cesa de perder poder social, económico y político. Esto explica el auge de la ultraderecha en todos los Estados de la UE para recuperar sus privilegios. Su propaganda mediática populista sólo es para captar votos y conseguir el poder absoluto.

 

Lo que desconocemos es la hoja de ruta de estos partidos de extrema derecha. No sabemos si quieren llegar al poder en sus respectivos Estados para abandonar la UE, o pretenden ser mayoría en las Instituciones de la UE para imponer sus políticas y dirigir los negocios de las multinacionales. Aunque son dos opciones diferentes, el problema es el mismo: la deuda mancomunada de la UE. Las deudas siempre se pagan aunque cuesten guerras. La UE está endeudada precisamente con las multinacionales financieras, esas que asesoran y financian las políticas de la UE, pero también esas que dirigen las economías y políticas globalizadas, y por tanto disponen de muchos medios coercitivos. En Geopolítica el mundo se está dividiendo en dos bloques, y tampoco sabemos en qué bando quiere situarse la extrema derecha europea.

 

Fdo.: Luis Perant Fernández

viernes, 15 de marzo de 2024

CORRUPCIÓN A DIESTRO Y SINIESTRO.

 



     
No faltan los ejemplos de personas que están en política por dinero, ni tampoco los mercenarios a sueldo de las clases adineradas, ni tampoco los líderes sociales profesionales que se venden al mejor postor. Todos ellos no son políticos, son gentuza sin escrúpulos, líderes obreros, empresariales y políticos que dominan a la perfección el arte de la retórica para confundir y lograr anteponer sus intereses. Son tan buenos actores que el saqueo de las arcas públicas es asimilado por la mayoría de los ciudadanos como beneficios para la sociedad. Si además dentro de su partido o asociación se fomenta la corrupción, entonces aparece ese personaje público repelente e engreído que está en posesión de la verdad. Y como está respaldado por un partido o grupo poderoso, pues pretende estar por encima de la ley, demostrando toda su arrogancia, descaro y chulería cuando habla en público.


            Lo que entendemos por políticos, son en realidad gestores. Son personas con vocación pública e inquietudes sociales, que están en política para aportar conocimientos, experiencia, ilusión y trabajo, por supuesto, todo ello desde una óptica ideológica. Son fieles peones de las directrices de su partido y por regla general cumplen con su cometido y trabajo. Pero la figura del gestor se desvirtúa cuando actúa como mercenario para algún lobby, y por iniciativa propia, o desde arriba, se les impone actuar al límite o fuera de la ley. Unas veces, para este tipo de encomienda son necesarios servidores públicos inteligentes, preparados y de plena confianza. En otras ocasiones, sólo se necesitan subordinados agradecidos, capaces de ejecutar las órdenes sin hacer preguntas, y si es posible, poco espabilados para no descubrir la trama.


            Al igual que el enigma del huevo y la gallina, nunca sabremos si primero nació la corrupción desde la clase política o desde la empresarial. Éstos se confunden, hay empresarios que se disfrazan de políticos y políticos que se camuflan de empresarios. Lo cierto es que el sector público gestiona mucho dinero y los empresarios, como es lógico, buscan negocio allí dónde se encuentra. No es momento de culpar o disculpar a unos y a otros, y la justicia debería ser ejemplarizante con sentencias severas en todos los casos de corrupción. Pero eliminar a los corruptos no garantiza terminar con la corrupción.


            Con la Constitución del 78, la Administración pública se descentraliza, se democratiza, pero sobre todo se expande y multiplica. En aras de una mayor asignación de recursos, las sociedades estatales, autonómicas y municipales huyen del Derecho administrativo, considerado poco dúctil y eficaz, por sus excesivas suspicacias y controles, y optan por el Derecho privado, mucho más ágil y operativo. Todo esto se consigue gracias a una serie de leyes promulgadas, la mayoría, en la segunda mitad de la década de los 90 y casualmente con gobierno del Partido Popular. La consecuencia primordial que se deriva de este cambio es la inaplicación de la legislación sobre contratos administrativos, en especial de los procedimientos de selección de contratistas, así como del régimen de función pública para su personal, todo lo cual ya no se controla por la jurisdicción administrativa, sino por la civil.


La evasión a fórmulas organizativas que admiten la utilización del Derecho privado va encaminada a liberarse de los rigores del control del Derecho público en materia de retribuciones funcionales, selección de contratistas, control de las intervenciones, etc. A mi juicio, el Derecho privado no sirve para garantizar los principios de igualdad, mérito y objetividad, porque en el Derecho privado son irrelevantes. Hay que desmitificar la creencia en la mayor eficacia de la Administración cuando actúa sujeta al Derecho privado porque no está condicionada por el riesgo empresarial, es dinero de los ciudadanos y los gestores no ponen en riesgo su dinero. Y por supuesto, el desvío del dinero público es posible al haber menos controles.


Las administraciones públicas sufren dos procesos de expropiación, una por la clase política y otra por el sector privado, conjugadas ambas a través de fórmulas negociables e intereses mutuos que permiten marginar el empleo de servicios de la administración y de la clase funcionarial. El proceso de desregulación, desmembración y privatización del sector público es la culminación de este gran negocio. Esta solución ignora las raíces históricas del Derecho administrativo que se sustancian en la protección del interés público, precisamente contra las malas tentaciones de los administradores de dudosa honestidad, que ahora son, cada vez más, miembros de la clase política y/o empresarial, o están subordinados a ellas mediante diferentes fórmulas de clientelismo. Mientras tengamos leyes confusas y discrecionales, y de dudosa constitucionalidad, que regulen las Administraciones públicas, siempre habrá corrupción.


Firmado.: Luis Perant Fernández

INFORMACIÓN


viernes, 1 de marzo de 2024

POLÍTICA DE SUPERVIVENCIA








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"POLÍTICA DE SUPERVIVENCIA" 


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Toda tu vida está dirigida y condicionada por el Sistema Político en el que vives: tus relaciones familiares, educativas, laborales, empresariales, asociativas, comerciales, administrativas, jurídicas, religiosas, amorosas…

Si conoces los entresijos de la Política con sus guionistas y actores, tal vez evites algunas de las trampas de esta vida en sociedad. De lo contrario, siempre tropezarás hasta con la piedra más pequeña en el camino de tu vida.

Mi visión y enfoque de la Política están condicionados y limitados por mis vivencias llenas de calamidades, marginaciones y privaciones, e inmersas en las injusticias y desigualdades sociales. No por ello mi verdad es menos veraz que el enfoque de la Política oficial, secuestrada y contaminada por las minorías más organizadas y pudientes, y por tanto, más alejada de los sectores marginales y deprimidos de la población.

La Política es el instrumento supremo que domina y regula todas las necesidades, actividades, negocios, ambiciones y vicios del ser humano, tanto en el sector público, como en el privado.

La Política es la palanca necesaria y deseada de todo gran negocio: el lícito y el ilícito, el local, nacional e internacional. Por ella se conspira, se mata y se masacra.

En Política todo está premeditado y calculado.
En Política nada es casualidad.

Nunca he escrito para aleccionar o adoctrinar, ni tampoco para agradar a los demás. Sólo pretendo recopilar y ordenar mis ideas. Si consigo despertar el espíritu crítico del lector, pues me doy por satisfecho.

Además, quién pretenda desafiar el poder instructor del sistema educativo y de los medios de comunicación en un sistema político-económico omnipresente, es que no conoce, o no ha entendido, el “Mito de la Caverna” de Platón.